Alerta en Chile: la cal de baja calidad impulsa la dependencia y San Juan aparece como solución

Mientras el país andino proyecta una brecha de un millón de toneladas de cal para 2032, un camino sanjuanino emerge como una solución vital para garantizar un insumo crítico para sus gigantes mineros.

Imagen generada con IA.

La vasta Cordillera de los Andes, que históricamente ha sido una barrera, hoy se transforma en una autopista de oportunidades para la industria minera. Chile, líder global en producción de cobre y con una creciente apuesta por el litio, enfrenta una amenaza silenciosa: la baja calidad y limitada capacidad de su cal local.

Este insumo clave, esencial para la flotación de minerales sulfurados y la purificación de salmueras de litio, impulsa una creciente dependencia de las importaciones, abriendo la puerta a una solución que surge desde la vecina provincia argentina de San Juan.

Datos de la Comisión Chilena del Cobre (Cochilco) proyectan que la demanda chilena de cal viva alcanzará 1,5 millones de toneladas para 2026, superando la producción interna. Para 2032, la brecha se volverá alarmante: Chile importará un millón de toneladas de cal, mientras que la producción local apenas alcanzará las 780 mil toneladas. Esta dependencia externa surge de factores estructurales, como depósitos de caliza más antiguos y menos puros en Chile, y elevados costos energéticos que encarecen la producción local.

San Juan, el Proveedor Estratégico

En este escenario, San Juan, Argentina, emerge como un actor fundamental. Con yacimientos de caliza de mayor pureza y costos de producción más competitivos, la provincia cuyana es el proveedor natural y actual de gran parte de la cal que Chile necesita. Actualmente, empresas caleras y proveedoras de servicios mineros sanjuaninas ya exportan sus productos a importantes proyectos chilenos. Sin embargo, lo hacen enfrentando serias complicaciones logísticas, como el engorroso y a menudo intransitable Paso de Libertadores en Mendoza, que genera retrasos, sobrecostos y considerables perjuicios para los transportistas.

El "Camino Minero": La Solución Logística Directa

Frente a esta situación, legisladores sanjuaninos, como el senador nacional Bruno Olivera y el diputado José Peluc (La Libertad Avanza), impulsan un proyecto que podría cambiar el mapa logístico regional: la habilitación de un paso fronterizo a baja altura en el departamento Calingasta, conocido como el "Camino del Río Blanco" o, popularmente, el "Camino Minero".

Esta iniciativa busca consolidarse como un nuevo corredor de exportación directo, conectando el valle de Calingasta con el proyecto Pelambres, uno de los yacimientos de cobre más importantes de Chile. El Camino Minero, que ya resulta transitable incluso para camiones de gran porte y cuyo mantenimiento realizan parcialmente empresas mineras, se presenta como una alternativa concreta, accesible y operativa. "Es un camino que se puede transitar en auto. Está perfectamente apto para camiones de gran tamaño", remarcó el senador Olivera tras una reciente visita al lugar.

La Necesidad de Rutas Directas en la Minería Chilena

La relevancia de este nuevo corredor es significativa. La menor calidad de la cal chilena no solo encarece la extracción de roca y disminuye la recuperación de minerales como el litio, sino que también aumenta las emisiones de CO₂, contradiciendo los objetivos de descarbonización de la minería. Para separar impurezas como magnesio o calcio en salmueras de litio, se necesita cal de alta pureza, una característica que la producción sanjuanina puede ofrecer de manera más eficiente.

La idea de habilitar caminos mineros directos desde San Juan hacia Chile para el transporte de cal y otros insumos no es nueva y ha resonado en importantes grupos mineros chilenos. Proyectos como Pelambres, que en ocasiones han enfrentado bloqueos en sus vías de abastecimiento —llegando incluso a requerir el traslado de combustible en helicóptero—, tienen un interés vital en asegurar una logística confiable y directa desde Argentina. La posibilidad de una "alianza público-privada" para el mantenimiento conjunto de este tipo de vías demuestra la necesidad estratégica que representa para ellos.

Este "Camino Minero" permitirá no solo un ingreso ágil de mercadería sanjuanina a minas chilenas, sino que abrirá la puerta a una futura conexión directa con el puerto de Los Vilos, a solo 80 km de Pelambres, proyectando a San Juan con un acceso propio al Pacífico en un recorrido de menos de 250 kilómetros.

La propuesta legislativa contempla una primera etapa de habilitación exclusiva para transporte comercial, sin requerimientos migratorios para los transportistas, para agilizar al máximo la logística. Con la elaboración de un informe técnico detallado y las gestiones con organismos binacionales, el "Camino Minero" se perfila como un puente real entre la producción sanjuanina y el mercado global, consolidando la exportación de un insumo clave y afianzando la integración regional en un momento definitorio para la minería de ambos países.